
La autora estadounidense Ursula K. Le Guin (1929) ganó con La rueda del cielo (The Lathe of Heaven) el premio de la revista Locus a la mejor novela, premio que en los años 70 consiguieron otros clásicos de la ciencia ficción como Los propios dioses (Isaac Asimov), Cita con Rama (Arthur C. Clarke) o Pórtico (Frederick Pohl).
Le Guin es considerada por muchos como la mejor autora de fantasía y ciencia ficción de los últimos tiempos. En sus obras imagina mundos posibles o imposibles en los que analiza las relaciones de género, los problemas medioambientales o étnicos, el sexo o la religión.
Su contribución a los géneros de la ciencia ficción y la fantasía la han hecho merecedora del reconocimiento incluso de los más reputados popes de la que podría considerarse “alta cultura”, que siempre han mirado con desdén estos géneros. Por ejemplo, el mismísimo Harold Bloom dijo, al hablar sobre su libro La mano izquierda de la oscuridad (1969), que Le Guin, más que Tolkien, había “elevado la fantasía al nivel de alta literatura”.
Además de ganar todos los premios más importantes dentro de los géneros de la fantasía y la ciencia ficción como el Nebula, Hugo, Locus y el World Fantasy Award, en el año 2000 la Biblioteca del Congreso de los EEUU la nombró “Leyenda viva”, premio con el que reconocían su contribución a la cultura estadounidense. En 2014 la National Book Foundation le concedió su medalla por su contribución a las letras, como reconocimiento a toda su obra.